Encuentra tu Serendipia

Talía Lanz

Es una marca que nació con la intención de llenar tu vida de color, alegría, diversión y buena vibra.

Con mis accesorios pretendo llegar a tu vida de manera inesperada pero placentera.

En Talía Lanz podrás encontrar un distintivo que te acompañará en tu vida diaria, como un pequeño talismán que te arropa y protege. Por eso, al imaginar y realizar un diseño sólo utilizo los mejores materiales, aquéllos que nos hablan de la tierra y nos acercan el cielo.

Y como todo lo bueno viene de nuestra tierra, utilizamos las piedras y la magia que éstas conllevan para que sean nuestras aliadas.

100% Hecho a mano

Todos mis productos están hechos a mano; optimizo el uso de nuestros recursos para respetar el balance del medio ambiente y así obligarme a siempre crear piezas únicas.

Una de las características de mis piezas es la variedad de materiales con los que trabajo, una de mis fortalezas es el desarrollo de diseños que realizo con textiles mexicanos. También hago piezas de plata, oro, bronce, aluminio, chapa de oro y siempre incorporo piedras que traigan una energía especial a mis creaciones. 

Inspiración

Creo que una de las mayores fuentes de inspiración son las culturas; en ellas podemos encontrar diversas maneras de ver el mundo, conocer conceptos diferentes de belleza y cosmovisiones que enriquecen la nuestra. Es por esto que procuro encontrar tanto en México como en distintos países donde producir joyería y accesorios, sin olvidar que lo mejor está hecho en México, por lo que hacemos de la producción nacional nuestra mayor aliada. 

Lo mexicano

Mi prioridad actual es desarrollar piezas con técnicas y textiles de nuestras comunidades indígenas y artesanos mexicanos para así poder mostrar nuestra riqueza cultural.

Veo a México como un pueblo que es pálpito, color y sueño. Un pueblo que tiende sus manos para tejer belleza, caricia y luz. Un pueblo que sabe que su mayor opulencia es el amor con el que crea.

Los artesanos llevan a un pueblo que canta y teje. Un pueblo que riela colores con sabiduría ancestral. Un pueblo cuya identidad está hecha de luz y paciencia, de rumores de tierra y de anhelos de cielo. Un pueblo que crea porque cree en la vida y urde alegrías, sueños y esperanzas.

Las piezas son creadas en sueños; con la ilusión de poder transmitir el orgullo de lo que es crear algo 100% mexicano.


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